960. Novecientos sesenta son los minutos que tiene el día si le quitas 8 horas de sueño. Tienes 960 minutos al día para hacer tus ideas realidad, y creo que este es el factor más importante a tener en cuenta. Todos tenemos las mismas 24 horas al día y lo que hacemos con ellas, independientemente de nuestros recursos, situaciones o conocimientos es lo que marca la historia de nuestra vida. Por eso si quieres hacer tus ideas realidad, lo primero que debes preguntarte es cuánto tiempo y esfuerzo estás dispuesto a dedicarles.

Vivimos en un mundo muy competitivo y la globalización hace que tu competencia pueda venir de donde menos te lo imaginas. Así que ya sea tu idea una startup, conseguir un puesto en una empresa, cambiar algo que no te gusta en tu entorno o simplemente superarte a ti mismo, piensa que puede haber decenas de personas a la vez luchando por lo mismo  que tú en varias partes del mundo, y que tu esfuerzo será fundamental a la hora de determinar un vencedor, incluso contra ti mismo.

Dicho esto, creo que hay tres cosas que es recomendable hacer para adquirir cierta perspectiva a la hora de hacer realidad una idea; saber de dónde vienes y a dónde vas.

Concretar qué es lo que quieres conseguir: Es difícil hacer el paso 2 sin saber claramente hacia dónde te diriges. Sea vivir en un país, trabajar en una industria o tener un impacto concreto en la sociedad, facilita las cosas tener al menos una idea de cuál sería la situación objetivo, aunque después la práctica te lleve por otros caminos.

Dividirlo en etapas más asequibles y medibles: creo que es fundamental eliminar el sesgo mental de esperar pasar de nada a todo en el menor tiempo posible. Estamos acostumbrados a que las cosas vengan de forma inmediata y sean rápidas, hemos perdido la paciencia, y la paciencia y el tesón son fundamentales para cualquier objetivo por el que merece la pena luchar.

Empezar avanzando poco a poco: se empieza a acabar una maratón corriendo el primer kilómetro. Es necesario estar mentalizado para trabajar y que las cosas a veces no avancen o incluso retrocedan. Es parte de la vida de quien tiene grandes metas darse tortazos contra la inexperiencia de vez en cuando

Muchas veces parece que aquello que quieres está por encima de tus posibilidades pero siempre hay recursos a tu alcance para dar los primeros pasos. Piensa que el mundo en el que vives fue creado por gente no más inteligente que tú. Eso sí, para ser bueno en cualquier cosa uno tiene que aceptar ser malo al principio.

Tenemos la suerte de ser una generación que ha crecido con Internet y eso nos da una ventaja incalculable. Tenemos valiosísimos recursos a nuestra disposición que el resto de generaciones pasadas apenas pudieron soñar. Estamos formados, el mundo nos quiere y sólo falta la voluntad y el atrevimiento de empezar para cambiar el mundo como sólo nosotros podemos hacerlo.

Entonces, ¿qué vas a hacer tú con tus 960 minutos?  

 

Ramón Maceiras Castillo – AIESEC in Santiago de Compostela

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